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Un estafador alquila a tres familias distintas una vivienda donde le habían dejado alojarse unos días

Imágenes de Salvador Herrero tomadas en el momento de firmar uno de los falsos contratos de alquiler | SOMOS MALASAÑA

Antonio Pérez

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El lunes 31 de agosto un matrimonio de colombianos entró en el piso del número 11 de la calle Bernardo López García que acababan de alquilar. Dos días después, la noche del 2 de septiembre, hizo lo propio, en ese mismo inmueble, una pareja cubano-española de músicos. A la mañana siguiente, jueves día 3, aparecía de igual modo por la vivienda una madre soltera con sus mellizos de dos años. Estas tres familias han sido víctimas de un estafador, que les alquiló a la vez un domicilio por el que cada una ha pagado 1.700 euros en concepto de fianza y renta de un mes.

Todos ellos habían firmado la semana anterior un contrato de alquiler con un tal Luis Miguel Valero, nombre falso tras el que se esconde en realidad Salvador Herrero García, un estafador a quien recientemente la policía buscaba por un timo relacionado con la venta de unos inexistentes cursos de auxiliar de enfermería en los que quedaron atrapadas decenas de personas, según lo publicado el pasado mes de mayo en el diario elPaís, en un reportaje en el que se le atribuyen distintos timos desde, al menos, el año 2012.

Herrero les entregó las llaves de la vivienda al recibir el correspondiente pago y les dijo que, a causa del “protocolo de desinfección de COVID” -según consta en una de las denuncias presentadas ante la policía- deberían esperar unos días antes de entrar en el piso.

Esta rocambolesca historia ha dejado aún más víctimas: la propiedad y la persona que realmente tiene arrendada la vivienda. Ambas partes se ven ahora en el brete de tener que negociar la salida del inmueble de quienes han sido estafados y que, sin querer, se han convertido en okupas de un alojamiento por el que han pagado.

Dos de las unidades familiares engañadas permanecen en este piso de dos habitaciones, compartiendo convivencia, y alegan no tener recursos para marcharse a otro lugar. Los terceros en discordia, la pareja de músicos, sí que han abandonado el inmueble tras denunciar la estafa. El matrimonio de colombianos carece de papeles, tiene un hijo de año y medio con ellos y la mujer está embarazada. La situación de la madre soltera con mellizos no es mucho mejor. Todos contactaron con Salvador Herrero a través de un anuncio publicado en la web milanuncios.com, en el que ofrecía “un piso cerca de Plaza España”.

Curioso es saber cómo llega Herrero al piso que acabó alquilando por triplicado a terceros. A principios de este agosto conoció a David C, inquilino legal desde hace dos años y medio de la vivienda en cuestión y, después de trabar amistad con él, le comentó las dificultades transitorias de alojamiento por las que supuestamente atravesaba, ante lo que consiguió que David le ofreciera instalarse unos días en su casa, en la que tenía una pequeña habitación de sobra y por la que casi no pasaba al estarse realizando en ella unos pequeños arreglos de mantenimiento.

La buena voluntad de David, muy conocido en la zona por la dilatada labor social que lleva realizando en el barrio desde hace años, resultó fatal para todos los implicados en este asunto: “Me pareció una persona agradable y correcta que necesitaba una ayuda puntual. Me enseñó su DNI cuando le dejé una habitación en mi casa, me dijo que trabajaba de profesor en un colegio e, incluso, me mostró una nómina...”

Justo después de aceptar la invitación de David, Salvador Herrero publicaba el 25 de agosto el anuncio con el que captó a sus víctimas y en sólo una semana gestó la estafa múltiple. Tras materializarla, Herrero, de 35 años de edad y natural de Talavera de la Reina, desapareció, siendo imposible contactar con él por teléfono y sin que se sepa dónde se encuentra actualmente.

El contrato que habilita a David como inquilino oficial del piso de Bernardo López García expira el próximo diciembre. Hasta entonces, y aunque haya en estos momentos otras personas viviendo allí, deberá hacerse cargo del pago de la renta y de los suministros. Todas sus pertenencias se encuentran en ese piso, desde ropa a muebles y electrodomésticos. Cuenta que, aunque tiene acceso al inmueble, la situación es muy tensa y, como quiera que había decidido no continuar en ese domicilio más allá de diciembre, se plantea rescindir lo antes posible su alquiler.

Por su parte, la propiedad de la vivienda, a través de la empresa que se encarga de la gestión de la misma, habría manifestado su intención de recurrir a la vía jurídica para resolver cuanto antes todo este embrollo en el caso de que las familias estafadas por Herrero, que se han quedado en el piso, perseveren en su decisión de no marcharse inmediatamente del mismo.

Los implicados han puesto en conocimiento de la Policía todos estos hechos, denunciando a Herrero García. En el artículo publicado por elPaís sobre el penúltimo golpe efectuado por este embaucador profesional también se le atribuye una acción similar a la que ahora protagoniza. Según lo expuesto en él, en 2018, alquiló en Carabanchel una misma propiedad a cinco personas distintas, aprovechando que el dueño del inmueble estaba de vacaciones.

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