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Malasaña Acompaña, ayuda para quienes se han quedado sin tarjeta sanitaria

Luis de la Cruz

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Una plataforma ciudadana – de sanitarios, ciudadanos y afectados – para pelear contra las mermas del sistema sanitario. Un método – el de la desobediencia civil – común al de otros movimientos sociales y ciudadanos que vienen desarrollándose en los últimos tiempos. Y un modelo organizativo – los grupos se van multiplicando – se podría decir que con la lógica de los forks en el software libre.

“Es lo que pretende la plataforma, que se multipliquen por los barrios, porque cada Centro de Salud es distinto a otro” Nos cuenta Patricia, participante en Yo sí sanidad universal y en Malasaña Acompaña, el grupo de acompañamiento del barrio, que hoy nos ocupa.

Yo sí sanidad universal nació como una campaña impulsada por profesionales de la salud contra el Real Decreto Ley 16/2012. Pronto se fueron sumando muchas más personas, no necesariamente profesionales de la salud. En el barrio se ha creado un grupo de apoyo con el sonoro nombre de Malasaña Acompaña.

“Acompañamos a personas sin tarjeta sanitaria a los centros de salud del barrio, el objetivo es que el personal sanitario también utilice la desobediencia civil y nadie se quede sin cobertura sanitaria”

Éste sábado llaman a la gente a acercarse a la Asamblea Popular de Malasaña, que se celebra a partir de las 13 h. en la Plaza del Dos de Mayo, para informarse sobre la actividad del grupo. El acto será sobre las 14:00 h. Pero la cosa no se quedará en una charla: se propone un acto de visibilización de las consecuencias del Real Decreto y apoyo a los afectados ¿En qué consistirá? Desplegarán pancartas, repartirán tarjetas sanitarias que han hecho y pasquines, “los tenemos en nueve idiomas”.

Profesionales de la salud y activistas coinciden en los efectos perniciosos del Real Decreto, popularmente conocido como Reforma Sanitaria. Se trata de una reforma estructural, que introduce la condición de asegurado, y delimita quién tiene y quién no tiene derecho a la sanidad universal en el Sistema Nacional de Salud.

“Lo que quieren es que la gente se haga seguros privados, por eso es importante que los afectados sepan que tienen opciones, de hecho sabemos de casos en los que incluso se han retirado tarjetas sanitarias a gente con derecho a ella”. Lo cierto es que, según datos de Médicos del Mundo, el número de personas que ha quedado sin tarjeta sanitaria en el último año va camino del millón, la mayoría migrantes, pero no sólo.

“Uno de los primeros acompañamientos que recuerdo fue aquí, en Malasaña - nos cuenta Patricia -una mujer con cáncer de mama ya diagnosticado. Tristemente acabó por volverse a Venezuela en busca del tratamiento que aquí se le negaba”. En muchos otros casos, nos cuenta Patricia con orgullo, hemos tenido éxito.

Hoy, después de la Asamblea Popular de Malasaña, en la plaza, la gente del grupo de acompañamiento nos animará a ser desobedientes y pelear porque nadie se quede sin sanidad. “Necesitan de nuestro silencio, que nos hace cómplices, para seguir cometiendo estas tropelías. La no acción es otra forma de acción”, nos recuerda Patricia, en nombre de Malasaña Acompaña.

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