Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Opinión: 'Nuestros gobernantes saben lo de Airbnb, pero no mueven el culo'

Obra de Pinta Malasaña 2017 relativa a la turistificación, del artista Antonio do Tormento | SOMOS MALASAÑA

Somos Malasaña

0

¿Que cuántos pisos turísticos hay en Malasaña y en el distrito Centro? La respuesta es sencilla: demasiados. No necesitamos más estudios de expertos para contestar con rotundidad a esta cuestión; primero porque ya se han hecho bastantes y segundo porque en el momento de publicarse ya están caducos: nacen con cientos y cientos de inmuebles de desfase.

La llamada turistificación está golpeando a la zona con fuerza, dejando víctimas y causando daños irreparables. Si fuera un huracán, le hubiéramos puesto nombre de persona y tendría categoría 1; las autoridades no habrían hecho nada antes de su llegada porque no lo habrían detectado con antelación, pero tampoco habrían hecho nada después de que tocara tierra en el distrito porque… ¡vaya usted a saber por qué!

En Somos Malasaña podemos presumir de haber sido uno de los primeros medios de comunicación -si no el pionero- en hablar en Madrid sobre el llamado efecto Airbnb. Logramos colocar el problema del exceso de alquileres turísticos en un barrio como Malasaña en la agenda de otros grandes medios, incluso de ámbito nacional, que fueron utilizando nuestros artículos de denuncia y nuestro conocimiento sobre el tema para publicar sus propias informaciones sobre la materia.

También alertamos a los políticos sobre lo que está sucediendo: cómo la presión turística hace subir los alquileres de larga estancia y vacía el barrio de vecinos, cómo edificios enteros de uso residencial están siendo alquilados sólo a turistas aprovechando vacíos legales -o incurriendo en claro fraude de ley, según se mire- y, entre otras muchas cosas, cómo empresas y fondos de inversión se han lanzado a tumba abierta a invertir en un negocio de pingües beneficios y nula regulación.

Un año después de iniciar de manera sistemática una cruzada informativa sobre este asunto, nos declaramos ahítos de cifras y de esperar a que una regulación ponga fin, o al menos coto, a un fenómeno que expulsa a malasañeros de sus hogares, arrasa con el comercio tradicional, envenena la convivencia en comunidades de vecinos y debilita a los colectivos sociales del barrio restándoles efectivos.

¡Que no es un problema de turismo, mayoritariamente, que es un problema de vivienda lo que se está dando y que detrás de cada inmueble que se vacía para ponerlo al servicio de un turista está el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid como cómplices necesarios de esta crónica de una muerte anunciada!

La red vecinal Lavapiés, ¿dónde vas? acaba de lanzar una campaña en redes sociales en la que pregunta retóricamente por qué si el Ayuntamiento ha identificado una serie de apartamentos turísticos -presentó hace unos meses un informe- no ha hecho nada al respecto. Con las etiquetas #Manueladinosalgo y #1mesmas100viviendasmenos afea a los responsables municipales su inacción. Antes de esto, el pasado 27 de septiembre, la red denunció ante el Consistorio a 200 pisos turísticos que hay en 18 edificios de Lavapiés y ha elaborado un modelo de denuncia para que cualquier vecino afectado pueda hacer lo propio.

Y si al Ayuntamiento le debemos pedir que abandone su pasividad, a la Comunidad de Madrid hay que exigirle que de una vez por todas reconozca la existencia del problema y tome cartas en el asunto. Si no será como si la mismísima Cristina Cifuentes sea quien envíe el próximo burofax que cualquier vecino del barrio recibirá anunciándole la finalización de su contrato de alquiler, sin posibilidad de renovación, porque el dueño del piso donde hasta ahora residía piensa que es mejor ofrecerlo en el mercado vacacional.

Los pisos turísticos de Centro -ilegales en su inmensa mayoría y alegales en el mejor de los casos- no son los únicos responsables de la turistificación y la gentrificación que expulsan vecinos de Centro, pero sí actúan como aceleradores de estos procesos. Nuestros gobernantes lo saben, aunque no mueven el culo.

Más información:

Más información:

Gentrificador de Pacotilla

¿Cuanto dinerito os pagan del lobby hotelero para publicar toda esta basura?

JH, vecina desde hace 20 años

¿En serio, Gentrificador? ¿Vives en el barrio? ¿Te parece de verpdad que va por buen camino? Y por cierto, ¿tienes alguna prueba de tu acusación? Si es así, por qué no la aportas?
Etiquetas
stats