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Malasaña, campo de batalla clave para las elecciones de Madrid

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Somos Malasaña

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Ciudadanos repartía este domingo folletos de propaganda electoral en la plaza del Dos de Mayo, con una carpa montada para la ocasión. Lo hacían a escasos metros de la vivienda de Cristina Cifuentes, su rival a batir en las autonómicas de finales de mayo y también a pocas calles de distancia del domicilio de Esperanza Aguirre, su contrincante en las municipales.

En los folletos de Ciudadanos no aparecía la imagen de su candidata a la alcaldía ni de su cara para las regionales. Mostraban a Albert Rivera junto a un texto con algunas ideas basadas en generalidades y pocas concreciones. El partido aún no tiene programa ni sus candidatos son conocidos, pero ya sabe que cuenta con el visto bueno del establishment y que tiene que empezar a moverse en uno de los puntos claves de la comunidad, donde ha colocado su sede en Madrid (C/ Carranza, junto a Bilbao).

En Malasaña se mueven estos días las piezas más importantes del tablero geopolítico regional. La pasada semana se presentaba en San Vicente Ferrer el proyecto de Ahora Madrid, la plataforma montada por la ciudadanía y la izquierda para devolver al Ayuntamiento unas políticas progresistas que no se conocen desde Tierno Galván. En Malasaña está una de las sedes espirituales (y reales) de este movimiento, el Patio Maravillas. En Malasaña se sitúa el Instituto Cardenal Cisneros, un lugar que acogió plenarios del grupo que originó el movimiento, Ganemos Madrid.

Otro instituto de la zona, el Lope de Vega, sirvió para acoger los primeros encuentros fundacionales de Podemos. Su círculo de Malasaña celebra habitualmente sus asambleas en el propio Patio Maravillas, su lugar de reunión habitual en el invierno después de empezar a la intemperie, en la misma plaza del Dos de Mayo.

El movimiento Ahora Madrid celebra a partir de este lunes sus primarias, que acabarán con la elección del candidato el próximo 1 de abril. En sus candidaturas podrían estar Guillermo Zapata, uno de los jóvenes políticos detrás del movimiento municipalista más relacionados con Malasaña.

Falta de propuestas concretas

El PSOE también ha tomado posiciones en la zona: su candidato Antonio Miguel Carmona nació en la calle de la Madera y ha montado su oficina electoral a la vuelta de la glorieta de San Bernardo, en la calle Santa Cruz de Marcenado. Es uno de los pocos candidatos al que hasta ahora se le han oído propuestas, tal vez porque es de los más veteranos en un puesto -el de aspirante a alcalde de Madrid- que a punto estuvo de perder con el golpe de mano de Pedro Sánchez en la federación madrileña. Un PSM que también tiene importante vinculación con la zona: la sede socialista del centro está en la calle Hernán Cortés y la del PSM en la plaza de Callao.

Lo que ha estado haciendo Carmona -dar propuestas- es lo que echan de menos los ciudadanos de Malasaña en particular y de Madrid en general. Propuestas para una ciudad que se queja y que no obtiene todavía respuestas. Es el momento de que los candidatos se mojen y digan qué pasará con el proyecto definitivo de los Jardines del Arquitecto Ribera, qué sucederá en los espacios autogestionados de la zona (Solar Antonio Grilo, Patio Maravillas), con los afters que abren ilegalmente, con la Escuela de Artes de Palma y con tantas otras circunstancias que afectan a la zona y que esperan soluciones por parte de los que la regirán durante los próximos cuatro años.

Lo que está claro es que el mapa político que nos espera tras las elecciones de mayo en nada se parecerá al surgido tras los comicios de hace cuatro años. Echar hoy en día un vistazo a los resultados de entonces es como remontarnos siglos atrás.

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