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Amenazado el uso público de los Jardines del Arquitecto Ribera

Antonio Pérez

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La provisionalidad de la estructura construida sobre los Jardines del Arquitecto Ribera para albergar a los comerciantes de Barceló mientras se construye el nuevo mercado está en duda. Unas declaraciones del concejal del distrito Centro, David Erguido, al periódico Gente Digital han hecho saltar todas las alarmas: los vecinos podrían no recuperar la zona verde de la que se les privó hace más de cuatro años, por causas de fuerza mayor, cuando en el primer trimestre de 2014 los comerciantes se trasladen a las nuevas instalaciones liberando los prefabricados.

Erguido comentaba al citado diario que la idea era aprovechar las estructuras provisionales para “hacer una biblioteca o construir un jardín interior”. Preguntado por Somos Malasaña al respecto el concejal afirma: “Aún no hay una decisión tomada y estoy sondeando todas las opciones”.

Los vecinos, en contra

Los vecinos, en contra

Las asociaciones de vecinos del barrio de Universidad (ACIBU) y la del barrio de Justicia se han apresurado a manifestar su frontal oposición a que las actuales construcciones que ocupan los jardines se queden sobre ellos y recuerdan al concejal que la provisionalidad de las mismas fue un compromiso en firme asumido por el Ayuntamiento y que la única discusión que cabe sobre el futuro de ese espacio es la del diseño definitivo de la nueva plaza, algo sobre lo que un heterogéneo grupo de vecinos (Vecinos Haciendo Jardines) viene trabajando desde hace un par de años, a través de un foro y con el beneplácito de los anteriores responsables políticos del distrito.

Aunque Erguido ha dicho que, en cualquier caso, hablará con los vecinos, la respuesta de las asociaciones vecinales ya la tiene. ACIBU, en un artículo publicado en su página web, 'Que no nos tomen el pelo', deja bien clara su postura. Por su parte, los vecinos de Justicia, a través de su presidente, José Carlos Nicolau, afirman: “Desde el mismísimo comienzo de la operación del Mercado de Barceló venimos insistiendo al Ayuntamiento sobre la necesidad de recuperar esa zona verde para la ciudad. El actual intento de mantener las estructuras del mercado provisional no es más que otra batalla en la guerra que el Ayuntamiento tiene declarada a las zonas verdes. Un intento de secuestro de espacios públicos en favor de espurios intereses comerciales”.

Los vecinos de Universidad también apuntan a que supuestos intereses comerciales estarían detrás del replanteamiento del proyecto que ahora Erguido se ha sacado de la manga: “Desde hace meses hay un rumor en el barrio sobre la existencia de un grupo de empresarios que querría hacerse con el mercado provisional una vez trasladados los puestos al nuevo edificio. Lo justificarían con la creación de puestos de trabajo, con el ahorro que supondría no desmontar la estructura actual y con la realización de actividades culturales y deportivas en el espacio cedido, todo para disimular un objetivo real que todos nos podemos imaginar”.

¿Política continuista?

¿Política continuista?

Cuando el pasado mes de mayo David Erguido tomó posesión de su cargo como nuevo concejal presidente, entre quejas de las asociaciones de vecinos de Centro por los supuestos retrasos y paralizaciones de negociaciones que el 'baile' de concejales presidentes del distrito supondría (Núñez, Corral y Erguido en poco más de seis meses), afirmó durante el pleno de la Junta Municipal de su presentación que haría una política continuista sobre los asuntos que ya estaban sobre la mesa. “Asumimos la gestión de nuestros antecesores para que los vecinos no noten el cambio”, dijo Erguido en su día. José Enrique Núñez, quien permaneció en el cargo entre los años 2007 y 2013, siempre habló de la provisionalidad de las construcciones sobre los Jardines del Arquitecto Ribera e, incluso, se mostró a favor de que la ciudadanía se implicara en la construcción de lo público y aportara ideas que pudieran introducir mejoras en el proyecto de reurbanización y ajardinamiento del mencionado espacio, un proyecto que existe y que fue elaborado por el estudio de arquitectura Nieto y Sobejano. Del mismo parecer era Pedro Corral, quien tan solo estuvo seis meses en la presidencia del distrito.

Más de cuatro años sin los jardines

Más de cuatro años sin los jardines

Fue en 2009 cuando los vecinos perdieron provisionalmente los Jardines del Arquitecto Ribera, para quien no los recuerde, un espacio histórico con una amplia zona de juegos infantiles, otra para mascotas, bancos para sentarse a descansar, una estatua, espacios verdes y árboles de gran tamaño. El 29 de abril de aquel año, Isabel Rodríguez, presidenta de ACIBU, en unas declaraciones a este periódico en las que denunciaba la tala, y no el traslado, de los árboles allí ubicados decía: “Cuando estos jardines vuelvan a ser utilizados como espacio público de recreo lo llenarán de cemento, a no ser que los vecinos nos movilicemos para evitarlo”. Más de cuatro años después de aquello, la batalla que quizá tengan que librar los vecinos no sea sólo contra la cantidad de granito que el Ayuntamiento decida o no poner en los recuperados jardines.







LOS PARQUES Y JARDINES SON CRUCIALES PARA PRESERVAR LA CALIDAD DE VIDA











Por Danko Linder (*)









D. Linder D. Linder




La ciudad de Madrid tiene una densidad de población elevadísima (más alta de lo que indican los números, ya que se incluye la superficie del Monte del Pardo, que no es accesible para los habitantes de la capital). Así pues, la densidad real es de más de 7.000H/km2. Haciendo una comparativa estadística, si el barrio de Universidad (aledaño a los Jardines del Arquitecto Ribera) fuera un arrondissement de París (la ciudad más densa de Europa) sería el segundo más denso de la ciudad: más de 34.000H/km2 (fuente: Wikipedia. cotejado con padrón municipal). La densidad del barrio de Justicia, donde se ubica el parque, es ligeramente más baja (23.000H/km2), pero aun así muy elevada. La gran diferencia con las demás ciudades europeas, es que Madrid no tiene ni gran río ni mar, por lo que los parques y jardines son cruciales para preservar la calidad de vida.



De la misma forma que el hombre necesita dos días de descanso a la semana para su salud, también necesita espacios no construidos dentro del tejido urbano para su salud. Sacrificar estos espacios es irresponsable, sobre todo al lado de un colegio del cual se ha reducido el tamaño del patio y cerca del que se va a suprimir otro parque infantil en breve. Reducir el espacio vital de una ciudad pone en peligro su cohesión y equilibrio social y aumenta los costes no solamente de salud sino también de seguridad.



Por otra parte, no deberíamos tener que explicar ya que el Plan General no permite edificar en esta superficie. Es necesario que los políticos actúen con mayor responsabilidad, no pueden sondar opiniones para decidir si disponer una cosa u otra si no tienen el derecho para ello. Es grave actuar de forma tan ligera sobre el tejido urbano sin ningun criterio. Hay muchas oportunidades de hacer negocios en la capital, no estamos en absoluto en contra de ello, pero hay que saber dónde.



(*Danko Linder es miembro de la plataforma 'Vecinos Haciendo Jardines'.  Arquitecto, paisajista y colaborador científico en el ámbito paisaje urbano de la Universidad de ciencias aplicadas de Suiza noroccidental, es cofundador del estudio madrileño UBERLAND)
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